¿Cuánto cuesta cambiar una caldera? Precios y Presupuesto
Más de la mitad de las calderas instaladas en España son ineficientes. Por eso, si tienes una caldera antigua, es muy posible que esté obsoleta o que pueda fallar. En el caso de la sustitución de calderas, está permitido instalar calderas estancas en viviendas unifamiliares aisladas. En edificios de viviendas, solo puede elegirse esta opción si se cuenta con un tubo de salida de gases comunitario a cubierta o bien con una salida a fachada o a un patio interior. Esta posibilidad solo aplica si la nueva caldera es de alta eficiencia (de condensación o de bajo NOx, por ejemplo) y si los ayuntamientos permiten sacar el tubo a la fachada.
En este artículo veremos cuánto puede costar cambiar, con precios orientativos que puedan servir para hacernos una idea antes de comenzar un proyecto. Recuerda que es el instalador profesional quien debe darte un presupuesto para cambiar tu caldera elaborado a partir de tus necesidades (potencia necesaria, número de baños, etc.)
En resumen, si la caldera tiene más de 10 años, es de combustión, presenta fallos o si vas a cambiar de sistema de calefacción, es el momento de plantearse su sustitución.
Actualmente en las Comunidades Autónomas hay ayudas para cambiar calderas convencionales por aquellas que emplean tecnologías renovables, como la aerotermia, la biomasa o la solar térmica. Son sistemas muy eficientes y de bajas emisiones, esenciales para reducir la contaminación atmosférica. Los conocidos como “planes renove de calderas” subvencionan parte del coste de la actuación, con distintas ayudas económicas según la Comunidad.
Quién me puede cambiar la caldera
El responsable de sustituir la caldera debe ser un instalador profesional autorizado, que garantice que la nueva instalación cumple con la normativa y es 100 % segura.
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Precio de cambiar la caldera
Si necesitas cambiar la caldera de tu casa, debes tener en cuenta que el precio variará según la tecnología elegida, pero también lo hará la eficiencia y por tanto el ahorro en el consumo. Es decir, cambiar de caldera siempre es una inversión que merece la pena y que se amortiza en pocos años.
Cambiar de gasoil por aerotermia
La aerotermia ofrece muchas ventajas frente a una caldera de gasoil: es mucho más eficiente, emplea energía limpia y su instalación es sencilla, siendo posible la adaptación del sistema preexistente. No requiere de mucho espacio, apenas precisa de mantenimiento en comparación con la de gasoil y, además, nos olvidaremos de los cambios de precios del gasoil y de estar pendientes de reponerlo cuando se agota.
La aerotermia es compatible con una calefacción por radiadores, por lo que se puede hacer poca obra y conservar buena parte de la instalación anterior.
El coste de cambiar una caldera de gasoil por un sistema de aerotermia puede variar mucho en función del tipo de instalación existente, las dimensiones de la vivienda o la zona climática. La aerotermia requiere una inversión inicial mayor que otras opciones, pero se amortiza en poco tiempo por el ahorro en el consumo. Puede estar entre los 8.000 € y los 24.000 €, según las necesidades y las características de la vivienda.
Cambiar gas por termo eléctrico
La ventaja de los termos eléctricos frente a las calderas de gas es que no necesitan suministro de gas ni adecuar la instalación a la normativa vigente, lo que en ocasiones exige obra para actualizar la salida de humos.
Tampoco son necesarias las revisiones periódicas por un técnico homologado, que con la caldera de gas es obligatorio realizar cada 2 años. Es decir, ahorraremos en mantenimiento, además de que el termo eléctrico es mucho más barato que una nueva caldera de gas, y su instalación es más sencilla.
Cambiar de una caldera de gas a un termo eléctrico es una opción económica, que dependerá sobre todo de la capacidad del termo y de su marca. A partir de 100 € se pueden encontrar los más baratos.
Cambiar de gasoil a gas natural
El cambio de una caldera de gasoil a una de gas natural permite tener un mejor rendimiento, además de contar con energía ininterrumpidamente y de forma individualizada. Necesita menos mantenimiento y no hay que estar pendiente de reponer el gasoil cuando se acaba el depósito, un espacio de almacenaje del combustible que, además, con una caldera de gas natural no hace falta. A esto hay que añadir que el gas natural suele ser más económico que el gasoil, que tiene mayor poder calorífico y que emite un 25 % menos de CO2.
El coste de cambiar una caldera de gasoil a una de gas natural depende del coste del nuevo equipo. Una caldera de condensación puede rondar los 900-2.500 €. La mano de obra dependerá de la empresa instaladora, pero suele ser en torno a los 350 €.
Cambiar gasoil por placas solares
Cambiar una caldera de gasoil por una de aerotermia alimentada por placas solares permitirá un ahorro económico muy importante. Tiene además la ventaja de que es un sistema renovable al 100 % al complementar el calor producido con el aire exterior con la electricidad que producen las placas solares.
Es decir, las placas solares alimentan la bomba de calor del sistema de aerotermia, aprovechando las horas en las que las placas generan más electricidad, para así almacenar el agua caliente y usarla posteriormente. Asimismo, se pueden implantar sistemas inteligentes para sacar el máximo rendimiento de la instalación.
El cambio de una caldera de gasoil por un sistema de aerotermia con placas solares variará según las dimensiones de la instalación, pero hay que tener en cuenta que suponen un ahorro de más de la mitad de la factura energética. Al sistema de aerotermia hay que sumar el coste de las placas solares, que pueden ir desde los 5.000 € en adelante.
Presupuesto para cambiar la caldera
El momento del cambio de caldera es una buena ocasión para instalar un sistema más eficiente y menos contaminante. Así, la inversión de la sustitución de la caldera antigua por una nueva se amortiza en pocos años al reducir la factura mensual de forma muy relevante. Cambiar una caldera antigua por una caldera de condensación, por ejemplo, se amortiza en 3 años gracias a su bajo consumo.
A la hora de estimar el coste, hay que tener en cuenta que el importe de las subvenciones depende de cada Comunidad Autónoma y los distintos requisitos y condiciones de los planes renove.
Lo mejor es pedir presupuesto a varias empresas instaladoras para comparar.
Alejandro Rodríguez
Redactor de contenidos en caloryfrio.com
Licenciado en Periodismo con amplia experiencia en radio, agencias de comunicación y medios impresos y digitales.
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