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Cómo instalar gas natural en viviendas

Para llevar a cabo la instalación de un sistema que funcione con gas natural, siempre hay que seguir una serie de pasos. A continuación, te contamos cómo es el proceso de instalación y cuáles son las etapas que debes seguir como usuario.

El primer paso para saber si podemos instalar este tipo de tecnología, es saber si nuestra vivienda o local, por la ubicación que tenga, cuenta con un acceso cercano a las tuberías de distribución de gas natural. Hay ciertos lugares en España que no cuentan con acceso a esta red y, por ello, es siempre el paso inicial que debemos dar. Esto se puede comprobar bien online o bien a través de ponernos en contacto con la distribuidora de gas natural de nuestra zona.

Una vez verificado la posibilidad de suministro, podemos acercarnos a instaladores o empresas instaladoras para que analicen la viabilidad y nos hagan un presupuesto sobre el tipo de instalación que tenemos en mente. Es importante comprobar que las empresas o instaladores con los que vayamos a trabajar cuenten con todos los certificados pertinentes de la normativa de gas natural.

Una vez recibidos los presupuestos, o incluso habiéndonos dejado asesorar sobre el mejor tipo de instalación durante el proceso de comunicación con la empresa instaladora, debemos comparar dichos presupuestos y elegir el que más se acomode a nuestras necesidades.

Tras la consecución del proyecto, el instalador emitirá el Certificado de la Instalación del gas natural, y la distribuidora lo verificará para emitir el código CUPS. El último paso es solicitar el alta del gas a la comercializadora.

Tipos de instalación: ¿cuál elegir?

El gas natural como combustible, siempre es instalado junto a una caldera. Las calderas son equipos que utilizan un quemador para quemar el combustible, y así calentar el agua que después se utilizará en la vivienda como agua caliente sanitaria o como calefacción. Existen distintas clasificaciones para las calderas en base a distintos criterios.

Según el uso que vaya a tener el equipo, se las puede catalogar como domésticas, comerciales o industriales. En base a la función, pueden ser consideradas como calderas de sólo calefacción o calderas mixtas (calefacción + agua caliente). También en función de dónde se instalen distinguimos las calderas murales (de muro o de pared), calderas de pie (o de suelo), y calderas de interiores o de exteriores.

En base a su tecnología podemos primero dividirlas en atmosféricas y estancas, siendo estas segundas las que más se utilizan en interiores ya que las atmosféricas solo son aptas para exteriores y espacios con ventilación muy específica. Finalmente tenemos el criterio que divide las calderas de condensación, calderas de bajo NOx y las calderas modulantes.

Como veis, hay gran cantidad de criterios, por lo que a la hora de elegir lo mejor es dejarnos asesorar por el instalador que vaya a realizar el proyecto.

Finalmente, también es importante mencionar que nuestra instalación de gas también puede ser de dos tipos: Instalación de Recepción Común (IRC) o Instalación de Recepción Individual. Estos dos tipos se diferencian en la forma en la que se realiza la acometida al suministro de gas. La IRC es para edificios o comunidades de vecinos más colectivas y sus derivados pisos, y la individual más orientada a viviendas unifamiliares.

¿Cuánto se tarda en hacer la instalación?

Hay distintos factores que pueden afectar al tiempo que se prolonga una instalación, pero se puede resumir de la siguiente forma:

Instalación Receptora Común (IRC): menos de una semana.
Conexión de Instalación Receptora Individual (IRI) a la IRC: en un solo día.
Vivienda unifamiliar que requiere conexión IRI a la red de suministro: aquí dependemos de la licencia municipal, que esta sí puede demorarse entre 30 y 45 días.

Cuánto cuesta instalar gas natural (subdividir precios entre instalación IRC e instalación IRI)

A pesar de que es muy complicado dar precios concretos, sí se pueden dar algunos precios orientativos que ayuden a saber cuánto puede costar la instalación. En una vivienda de unos 10 radiadores en uso en la que se requiera una instalación completa vista sobre el rodapié, el precio de la instalación completa puede estar entre 4.500 y 5.500 € más IVA, teniendo en cuenta las diferencias de precio en función del modelo de caldera o si hace falta realizar una acometida IRC o IRI para la distribución del gas. A continuación, vamos a desglosar este precio.

Precios de la instalación de radiadores 

Para instalaciones vistas en cobre, el precio por punto de radiador está en torno a 170 € + IVA por punto. En cuanto a los distintos elementos del radiador, se estima su precio en 15-18 € + IVA cada elemento.

Precio de calderas de gas con instalación incluida 

Una caldera de condensación puede costar desde 1.300 € + IVA un modelo básico, hasta 3.000 € + IVA en caso de que se trate de un equipo de acumulación en alta gama. Por lo tanto, podemos concluir que cuestan de media unos 1.800 €, a lo que habría que añadir 100 € por la instalación de un desagüe para los condensados. 

Precios del alta en gas natural y acometidas 

En el caso de que exista la necesidad de hacer una instalación de gas desde cero en una vivienda que no contase con acceso a gas natural, el precio puede variar según la oferta de la distribuidora de la zona, pero puede rondar los 600-800 € + IVA en viviendas unifamiliares hasta 30 m de tubo (IRI), según como sea la regulación, y sobre 200-300 € en el caso de una vivienda en bloque (IRC). 

El precio de alta al gas natural está regulado y se sitúa en torno a los 200 €.